PONTE POR DEBAJO DE QUIEN AMAS PARA QUE TE APLASTE
28 de octubre de 2025 
Sabia Dihaz
Ponte por debajo de quien amas para que te aplaste. Deja que tu amor te anule, que con su boca te sangre y con sus manos te hiera. Nadie quiere la modestia en el amor. El Amor: me he corrido tres veces pensando en negro.
La lluvia moja mi cara, y tú, hijo de puta, contando con los dedos lo que te guardas.
Ponte por debajo de quien amas para que te aplaste.
Mi padre cogió el cinturón, y zas, correazo. Qué amor más grande, el de mi padre. Los límites difusos entre la ira y el tormento. Su nariz mojada dejaba caer en el suelo de la cocina gotita a gotita un sudor nervioso. Cogía una silla, la daba la vuelta y quitaba la pelusa de las patas. Y sudaba. Y hablaba tal y que cual. Cuánto le quería ahí, así, en esos momentos. Mi padre, manojo de nervios que alteró los míos. Y entonces, por la tarde, a media tarde, fumaba y se tranquilizaba. Fumar importa más que tener el estómago lleno. Es necesario que papá fume, papá, si yo pudiera, te daría todo, todo, todo. Papá, necesito respirar. Cuánto amor siento hacia ti, papá. Por encima de mi padre está Dios, y Dios nos protege, pero ya no rezamos, todos juntos quiero decir, puede que la vergüenza nos obligue a ello en Navidad, por ejemplo, y entonces escuchamos, Gracias por estos alimentos… Mis hermanas levantan la cabeza y ponen gesto irónico y yo en ese momento las mataría. No se dan cuenta que debajo de Dios está papá. Papá es tan grande que todo amor al lado suyo es mero espejismo. Mi padre se ha caído, ¿sabes? Ha sufrido temblores, ha rezado por conseguir levantarse, ha escrito cartas de amor a mi madre en su desesperación diciendo que se acordaba de nosotros, de ella, de sus hijos, que nos echaba de menos. Nosotros a escondidas sentenciamos para siempre su culpa: esta vez no se lo perdonamos. No, esta vez no. ¿Otra vez nos deja solos…? Y mi madre sola, porque la madre nace y muere sola, y se ríe y llora sola, y empieza a desvariar, a coger prestado lo que no la dan, a mentir, a hablar en plural. Ella es mi padre y mi padre es ella y la mano que golpeó se ha fundido con el cuerpo que recibió el golpe y ya no hay dos sino uno. Sólo hay amor. Amor.
Ponte por debajo de quien amas, mamá, mira que así no se te ve la cara.
