El gabinete alquímico de Maese Pizzolatto
7 de junio de 2019 
Una introducción a True Detective 02
Blanca Perse
Bienvenidos a Vinci, una ciudad de 97 habitantes anexa a L.A. que recibe diariamente 70.000 trabajadores ilegales. Fue fundada a principios del s.XX, y es una formidable máquina de hacer dinero: sweatshops, casinos y demás tipo de negocios de oscura denominación moral. Austin Chessani, alcalde patriarca de este rentable feudo, proviene de una familia que tiene por tradición abusar física y psicológicamente de esposas e hijas. El siguiente en la escala de poder es Holloway, que como jefe de policía garantiza que la corrupción sea la ley. Y Ben Caspere, el ser más vicioso y pervertido del planeta, completa el maquiavélico triángulo gestionando sobornos, reducciones fiscales y blanqueo de dinero en su papel de city manager.
Es en este atanor donde cuatro personajes negros como el viejo corazón del infierno han de encontrar su muy esquiva piedra filosofal: Antigona ‘Ani’ Bezzeriddes, detective de tendencias ninfómanas y cuantiosas deudas de juego; Paul Woodrugh, oficial de autopista, ex-mercenario legal en Afganistán y homosexual en fiera lucha contra su deseo; Ray Velcoro, detective y matón a sueldo que lucha por la custodia de un hijo que nació nueve meses después de que su mujer fuese salvajemente violada ; y Frank Semyon, el gánster más despiadado y mejor hablado en la historia del film noir.
Nic Pizzolatto aviva el fuego sobre la redoma tomando inspiración de la existente ciudad de Vernon, California; los disturbios civiles de L.A. en los 90; las comunas hippies que aún hoy prosperan en la costa este norteamericana; organizaciones privadas y paramilitares que gentilmente colaboran en todas las contiendas norteamericanas ‘contra el terrorismo’; institutos espirituales donde se enseña a navegar esta invisible red de existir; y hospitales donde la terapia psicológica incluye ajustar el perfil a lo Lana Turner y acompañarlo de dos ó tres enormes tetas-globo. Ya sólo con esto se entiende por qué cierto stablishment desplegó una campaña anti-TD02 efectiva… hasta en España!. Pero es que hay más.
Actuando como substancias catalizadoras figuran Ossip Agranov, cabeza visible de la mafia ruso-israelí; McCandles, CEO de una laberíntica cadena de holdings que sustentan masivo desarrollo inmobiliario en tierras de cultivo convenientemente contaminadas; Ledo Amarilla, miembro de un cartel mexicano devoto de la Santa Muerte; y Geffof, fiscal general en absoluta colisión con todo lo anterior y aspirante a gobernador de California.
Pero Maese Pizzolatto no se queda ahí: aún tiene redaños de espesar aún más este prometedor caldo: redes de prostitución de élite importadas del este de Europa para goce y disfrute de la flor y nata de todas las esferas de poder que podrían encontrarse en cualquier encuentro de Bohemian Grove. Y reto a quien diga que el elaborado resultante es de mala calidad.
No ha habido antes otra serie que haya organizado con tanta destreza y sabiduría este constante fluir de cadáveres con chófer propio, sillas de tortura con restos de sangre con gonorrea, diamantes de raro azul que aparecen y desaparecen en mareas de violencia sin precedente, la autopsia de un cuerpo horrorosamente mutilado, desayuno-duelo con pistola bajo la mesa, premonitorios árboles milenarios, placas de policía arrojadas a la basura, caballeros que no pueden prescindir de su chaqueta ni en el desierto, mujeres adictas a la sodomía, bestias semi-anaconda semi-tiburón blanco, chaquetas que esconden $3.5 millones en gemas sin defecto, guerreras de hábil navaja que desangran hombres en menos de 5 segundos, mejillas en las que se estrellan copas de whiskey con la ira propia de cualquier dios mesopotámico, y en suma, muertos que no saben si están muertos o todo es, efectivamente, un sueño.
La audiencia aplaudió mucho el tiroteo que marca el ecuador de la primera temporada, y en mi opinión es muy inferior a la compleja geografía y coreografía del de esta segunda. Me fascinó tanto que por primera vez en mi vida, integralmente fascinada, traté de dibujar su dinámica. La composición pictórica con la que se cierra es digna de exhibirse en el Prado junto con Las Lanzas de Velázquez.
Nic Pizzolatto no se pasó años de profesor de literatura en vano. No sé si les gustó a los norteamericanos, pero a mí me emocionó encontrar dos personajes llamados Athena y Antigona, y que el instituto espiritual se llamara Panticopaeum, y que alojado en los subterráneos secretos de Los Angeles descubriéramos a una de las más brillantes actualizaciones de Hades. Castaneda y Gingsberg también aparecen junto con otras referencias mágicas más locales.
En este riquísimo fango de especies al borde de volverse verdadero horror a lo Conrad, se va destilando lento el momento en el que la unión del sol y la luna producen por fin al hermafrodita. ¿Será que he leído demasiado las bodas alquímicas de Christian Rosenkreutz?
Quizá todo sea alquimia, como escribieron nuestros mayores. O todo es follar, como aclara Vera tras una sobredosis de Molly y champagne. O todo es de paper maché, como sospecha Frank. O baldío, como recitó Eliot. O profundamente triste y maldito e insoportable como las letras de Lera Lynn. O no: quizá sólo hay que esperar a que la barca coagule la mejor de las transmutaciones con una mujer que custodia a una mujer que custodia a un niño en Venezuela. Hay atardeceres de soledad en flor en los que todavía me pregunto por qué esta maravilla es rechazada en masa.
ENLACES
Disturbios civiles L.A. 1992 – https://en.wikipedia.org/wiki/1992_Los_Angeles_riots
Black Mountain – https://en.wikipedia.org/wiki/Academi
Russian Israel Mafia – https://en.wikipedia.org/wiki/Israeli_mafia
Panticapaeum institute – https://www.esalen.org/
